Tuesday 27 July 2010

Remanso de paz




Es difícil imaginar que justo en medio del caos de una enorme ciudad como Londres pueda existir un lugar que emana paz por cualquier rincón.

Hay una senda para caminantes que rodea la ciudad... una senda que atraviesa calles y campos, bosques y lagos y que ayuda, a quien se atreve a recorrerla, a descubrir el profundo respeto y amor que sienten los ingleses por la naturaleza.Es como retroceder al pasado, redescubrir un rincón y fundirse con la esencia de las personas que antes que uno dejaron sus huellas en esos lugares.Impone y exíge respeto.Aún en silencio, lo hace.

La semana pasada sin esperarlo me topé por casualidad con uno de ellos. Harrow school,una escuela fundada nada menos que en 1572. Apenas a 15 minutos en metro del mismísimo centro de Londres, ese centro que está en constante movimiento, que emana energía, que te arrastra y te envuelve sin que quieras.

Al comenzar a subir la colina, cuando uno se aproxíma a Harrow School,algo te sorprende sin que puedas explicar qué es. Aparecen de repente los verdaderos habitantes de la colina. En una calle repleta de mansiones, titanes que guardan celosos entre sus muros tantas y tantas historias, te envuelve la juventud.

Quizás por eso me gustó tanto, no tenía ni idea que iba a toparme en lo alto de la colina no sólo con algunas de las mejores vistas de Londres, sino con tanta historia comprimida en tan poco espacio.

Escondida entre altos y antiguos edificios, se encuentra la iglesia de Santa María.
Comenzó a construirse en el 1087 y aunque no es grande, el pico de su torre puede verse a lo lejos.

Por casualidad quise desviarme de nuestro camino y entrar en su recinto. No tenía ni idea de que la senda que recorríamos lo atraviesa.Fue una grata sorpresa encontrar el poste con el cartel de la senda en su puerta.Rodeada de vegetación, enormes árboles, arbustos y plantas de todo tipo intimida. Es como si hubiera estado ahí desde siempre...

Estuve un rato sentada en uno de los bancos, observando las vidrieras, el altar mayor y su techo. Regresé al exterior y caminé por el terreno, sembrado de tumbas sin poder evitar preguntarme qué historia tenía aquel rincón.

Al regresar a casa descubrí qué escuela era esa, gracias a internet averigué que es un colegio para chicos que además cuenta entre sus alumnos con personajes tan importantes como Churchill, el rey Hussein de Jordania; poetas y escritores como Sheridan, Trollope, Dornford Yates y Richard Curtis; Lord Rayleigh y muchos más.

Claro que yo ya sabía, antes de leer todo aquello, que aquel no era una lugar cualquiera.Tal vez busqué la información tras haber hecho mi propio descubrimiento sobre el terreno. Entre los arboles, en el margen izquierdo descubrí un caminito que me llevó a un par de sencillos banquitos, con una lápida con algo escrito, una placa conmemorativa y las vistas que se observan en la fotografía.

Puedo confesar ahora que pocas veces me he alegrado tanto de saber inglés. Curiosa me acerqué a leer y fue así como supe quién más había atesorado aquel rincón como el mejor en todo el mundo.

Eran unos sencillos versos de Lord Byron, poeta, escritos por él en ese mismo lugar, su lugar. Allí acudía a esconderse de la gente siendo estudiante, allí se encontraba con su musa y allí enterraron los restos de su hija según su deseo.

Me considero muy afortunada... nada parecía indicar que una sencilla caminata lograría trasladarme al pasado, revivir la historia y disfrutar del mismo paisaje, seguramente algo transformado, que inspiró a semejante personaje histórico. Todo un placer.

Saturday 10 July 2010

Brillará el sol para otros ojos...

Cuando la vida te vuelve a sonreir, aunque no lo creas, yo soy feliz por tí.

ALEJANDRO SANZ/ NUESTRO AMOR SERA LEYENDA.
No hay doctor que me retenga
No hay dolor que me detenga
No hay planeta que me eclipse
O de tu lado me desvíe

Del clamor yo no dependo
Del halago me desprendo
No hay error que me resigne
Ni un porqué que me empecine

No hay rencor que me de frío
No hay amor como este mío
Tus acciones te definen
El destino es quien camine
No hay temblor que me delate
No hay distancia que esté lejos

Desde lejos nos tenemos en el fuego
Desde lejos nos tenemos en los mares
Desde lejos yo te siento amor
Desde lejos nos tenemos en los huesos
Desde lejos nuestros cuerpos se hacen aire
Desde lejos yo te puedo amar
Desde lejos nuestro amor será leyenda
Desde lejos hablarán
De este amor que es de leyenda van a hablar

No hay honor en esta guerra (ni en ninguna guerra)
Ni fervor que la merezca
No hay un fin que me de brío
No hay bufón que me divierta

Si eres fe yo me convierto
Tu existencia me da aliento
Te lo digo convencido
No hay amor como este mío

Y eso siento más o menos
Y por eso mismo muero
Dime si no merecemos
Dar la vida en intentar
Si he de amarte desde lejos
Quiero hacerlo hasta el final… final, final.

Desde lejos yo te quiero con el fuego
Desde lejos yo te tengo con los mares
Desde lejos yo te siento amor
Desde lejos nos tenemos en los huesos
Desde lejos nuestros cuerpos se hacen aire
Desde lejos yo te puedo hablar
Desde lejos nuestro amor será leyenda
Desde lejos hablarán
De este amor que es de leyenda y tú te vas